Catálogo de competencias “no tan digitales”

Tal como llevamos 50 años repitiéndonos, “el futuro ya está aquí”… Inteligencia Artificial, bots y robots, Internet de las cosas, Teletrabajo, Telepresencia, Simulación, Formación on-line, Big-Data, Cloud Computing… ¿seremos capaces de adaptarnos a tiempo y encajar competencialmente en esta “nueva” realidad?

Prácticamente se nos insta a dar por perdidos nuestros empleos en pro de convertirnos en una “horda de neo-especialistas”, como si la única manera de adecuarnos al avance de la tecnología fuera la de convertirnos en sus “perfiles periféricos”.

… pues mira, no estoy de acuerdo… (ni como tecnológo, ni como persona)

… perfiles digitales, SÍ, deshumanizar los oficios, NO.

No creo que la única manera de “coexistir con el robot que me quitaría el empleo” sea la de convertirme en “quien le da de comer al robot” … pues posiblemente, como ser humano, aún soy capaz de hacer algo que él no sabe hacer, ¿no?…

No es una cuestión de “luchar contra el avance”, es una cuestión de manenter nuestro liderazgo emocional e intelectual en dicho avance.

Así pues, por si alguien pueda encontrarlas de utilidad (y desde luego, ampliarlas o matizarlas, que en esto estamos todos), me atrevo a desglosar algunas recomendaciones sobre lo que debiera, en mi opinión, representar la verdadera “competencia digital”, desde lo digital a lo humano, tanto en lo personal como en lo profesional:

(* las más RELEVANTES … sin duda las 3 últimas…)

  • Destreza ofimática: lo importante no es la herramienta, es tu trabajo, pero si no explotas al máximo la herramienta, en potencia y en velocidad, estás perdiendo un tiempo precioso para aportar tu verdadero valor. Párate un poco, deja de hacerlo “como siempre”, y dedica algo de tiempo en aprender, lo agrecerás eternamente.
  • Mira el software de otra manera: no te preguntes, <<¿con esto qué puedo hacer?>>, pregúntate <<lo que quiero hacer, ¿cómo lo hago con esto?>>.
  • ¿realmente sabes “escribir a máquina”?: muchas personas sí, pero quizás no al ritmo que se puede, quizás con vicios, quizás mirando el teclado … nunca es tarde (yo aprendí con 12 años en 1 semana pintarrajeándome las letras que debía pulsar con cada dedo) … ¿has calculado cuánto tiempo dedicas al día a escribir?
  • Al otro lado hay personas: entre tanto proceso sistematizado, herramientas de trabajo y canales de comunicación, llega en un momento en que nos sentimos, y lo peor, entendemos a los demás, como “piezas mecánicas de este gran puzzle” … no olvides ser amable, decir “por favor”, decir “gracias”, decir “lo siento”, preguntar “cómo estás”…
  • Todo a la vez, no es verdad: abandona la “falsa multitarea”, concéntrate, apunta para después, atiende al que expone en tu reunión, descuelga el teléfono, apaga el correo, apaga el whatsapp… no pasa nada, siempre pueden esperar… a que hagas bien el trabajo que les debes.
  • No consumas solo “píldoras”: profundiza, no te quedes en la superficie de lo inmediato, de lo fácil, de lo rápido…
  • Discrimina: no te “infoxiques”, aprende a buscar, aprende a filtrar, aprende a reconocer la buena información.
  • No a las fake-news: no caigas en la tentación de creer y transmitir lo que incluso a ti te gustaría que fuese cierto, o curioso; no te conviertas en parte de la manipulación y de la viralización; aprende a reconocer cómo te manipula “el enemigo”, y lo más habitual, cómo te manipula “el amigo”.
  • Sobrevive al fraude digital: desconfía sistemáticamente de quienes desean averiguar tu información personal, de los que te amenazan con tu privacidad, de los que te asustan con tus deudas económicas o tributarias, de los que te ofrecen la salvación económica … no pulses…
  • Que no te influyan los “influencers”: ten tu propio criterio, no te acomodes comprando todos esos “packs indivisibles de ideas preconcebidas”… escuchar está bien, pero creer ciégamente va en contra de toda personalidad original.
  • Piensa críticamente en lugar de criticar el pensamiento: ni encasilles a otros, ni te dejes encasillar, en el “catálogo electrónico de enemigos disponibles”… mejor escucha, piensa, empatiza, debate…
  • No alquiles creyendo estar comprando: ten cosas, guarda bien tus cosas, no sucumbas a esta tendencia de que “todo lo tuyo está bien con ellos mientras mantengas tus suscripciones”, pues el día que “rompáis”, comprobarás quién manda realmente sobre “tus” cosas.
  • Manten un “yo digital” presentable: no mientas, puedes “decir la verdad aunque la hagas fascinante”, no expongas tu privacidad en exceso, mide cuánto “compromiso” con causas sensibles y conflictivas deseas expresar … es tu huella digital.

… y para finalizar, las que para mí son las verdaderas CLAVES:

  • Disponte al cambio: no es momento para retrógrados, el avance es imparable y si te resistes te pasará por encima, pero una cosa es adaptarse, embarcarse en él, e incluso favorecerlo, y muy otra sería consentir que todo esto fuese a costa de nuestra propia personalidad… aprende a usarlo en tu favor.
  • Vive “off-line”: la realidad está ahí fuera, esto no es más que un canal, no son más que herramientas, no son más que contenidos… vivimos en un planeta increíble entre personas increíbles… tócalo, reconocelo, reconocelas.
  • Mantén y potencia “el lado humano de tu oficio”: hazte valer, demuestra por qué una máquina sería absolutamente incapaz de hacer lo que haces… pon emoción, pasión, creatividad, innovación, calor humano, originalidad, imprevisibilidad, sorpresa, gracia, arte, pensamiento lateral…

La verdadera competencia “digital” es USAR la tecnología, NO SUBSUMIRNOS a ella.

… no sucumbas, no te conviertas en una pieza más de esta gran maquinaria, pues todo lo que hacemos “no está mal para ser… humanos”.